Al recordar todo lo que había pasado,
ya no sentía nada, ni siquiera sensación de vacío. Quizá la vida la había hecho
mas dura, pero no, solo era la sensación de sentir que fuera así……………………….
El sabor de la alegría que hacia
sentir esperanzada, la lucha era evidente, el querer y no poder,
Pero el esfuerzo no cejaba, seguía
dando muestras de su poder, tenia que poder.
Salió a la ventana, miró al infinito
y donde antes había noche ahora había vida, estaba el sol.
Se arregló, se pintó, clavó sus tacones
de aguja y se dispuso a enfrentarse a sus miedos, el resultado solo lo vería en
las caras de los demás, sabría si esas fuerzas que tanto necesitan iban
entrando en su cuerpo.
Abrió la puerta, bajo decidida las
escaleras, cerró el portal y allí estaba en la acera.
Tomó aire y empezó su camino, sabía
claramente donde llegaría, lo que no imaginaba era como lo haría.
Una voz muy conocida escuchó y
el corazón casi se le sale por la boca. Era el policía que le había tomado la
denuncia. Ya lo hemos localizado, lo tenemos en comisaría, y he querido
comunicárselo directamente. Estas cosas no se hacen de otra forma,
Venían tiempos revueltos, difíciles,
distintos, pero sabía que podría superarlos, ya no estaba sola, tenía un
horizonte, tenía la ilusión de verlo por fin.