martes, 29 de enero de 2013

La Antena



Estaba siempre con la antena puesta. No había nadie en el mundo mas cotilla que el. ......

Todo lo que pasara por su mundo era de su interés, las cosas menos importantes las hacia sublimes, las importantes sencillamente eran maravillosas. De todos sabia, y de nadie no existía.

Los cotilleos eran declaraciones ante jueces. Los rumores puras sentencias de jurisprudencia. 

Un nacimiento, una boda, un entierro, el santo, el divorcio. Ese era él.
El protagonista.

Todo ocurrió muy rápido, su mujer lo dejó, del trabajo lo despidieron, las enfermedades se agolpaban.

Y ahora su vida se tornó en su peor novela real.

No hay comentarios:

Publicar un comentario