Ya vuelves lleno de arrugas. Tu cara es un
poema del cansancio. Arrastras tus angustias por la escalera del desaliento.
Fuiste al fin de semana esperado del año a retomar las energías tiradas por las
estanterías de los problemas, los cajones del despacho y los mensajes de no
continuos.
Saliste con la comisura hasta las orejas y
las cejas dobladas de la esperanza y vuelves con la boca agria y los ojos
tristes. No conseguiste librarte de lo ajeno que aun te llevaste de lo propio.
Olvidaste reírte y te encontraste con tus miedos. La nostalgia te inundó de
nuevos recuerdos ya olvidados.
No te mires más dentro y deja el espejo del
salón sin luz. Mal viaje de descanso que solo te trajo cajones de nuevas
avispas. Olvídate de estos viajes provocados de descanso que se tornan en
infiernos de fatigas.
La próxima no tengas ganas de hacer. Ten
ganas de no hacer. Volverás con la risa en tu boca y la alegría en tus ojos.
El descanso en tu alma y la energía en tu
corazón
sobre todo con el brillo de tu miradaaaa!!!!!
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